viernes, 8 de junio de 2012

El dilema de los segundones (1)

Esta temática viene a ser tan vieja como la propia competición,cuando se crearon los primeros equipos enfocados a las carreras,ya fuera en circuitos o en rallies;incluso no está de más decir en cualquier competición donde hubiera más de un corredor por equipo(caballos,bicicletas,motos,etc).
Ese gen competitivo que innatamente llevan algunos elegidos les hace intolerables a la sumisión frente a otro compañero, aún a sabiendas de perder una posición preferente en cuanto a conseguir resultados se refiere en contra de otros,la mayoría,que acaban claudicando precisamente en favor de esa posición preferente(lo que viene siendo el acomodo frente a la ambición).La historia está llena de ejemplos.
Actualmente en el WRC tenemos el caso de un piloto como Mikko Hirvonen que después de alcanzar su madurez profesional luchando por ganar la corona mundial en los últimos 3/4 años(no sin antes deambular durante algún tiempo por varios equipos y estar a punto de ser deshauciado en su etapa con Subaru) decidió dar un paso atrás y convertirse en mero escudero de un "tal" Sebastien Loeb.
Debido a la inestabilidad por la que pasa el Mundial,nadie puede asegurar que Hirvonen no vuelva a correr por victorias pero el paso atrás hay queda.
Daniel Sordo es otro caso de un piloto que se acomodó en un equipo en el cual, si se hubiera reivindicado cuando le"aconsejaban"frenarse,tendría más de una victoria en su palmarés y su caché como top-driver habría subido muchos enteros,permitiéndole a buen seguro luchar por algo importante a estas alturas. En cambio optó por la vía de la sumisión y otro piloto con mucha más garra(al menos es lo que han demostrado uno y otro) le pasó por la derecha,Sebastien Ogier para más señas.El joven galo decidió ir en contra de esas voces que sí frenaron a Sordo y hacer frente al pluricampeón y jefe supremo Loeb.Su actitud agresiva le costó el puesto pero su caché si subió como la espuma(7 victorias lo avalan) y ahora es primer piloto de Volkswagen para 2013;siempre y cuando los alemanes no se "rajen" como ya apuntan algunos rumores.

Como os habréis dado cuenta todo eso ha ocurrido en Citröen, y es que las políticas de equipo no son las mismas en todos lados y ahí precisamente en los equipos donde marcan claramente  al primero y al escudero, es donde los verdaderos ganadores se revelan.
Antes de salir de la órbita de los chevrones,hay que nombrar a Francois Duval; un piloto que siempre fué de segunda fila pero quiso probarse a sí mismo en 2005,acabando como acabó.Para bien o para mal,siempre se le recordará.

news.bbc.co.uk
Después de dar un salto en el tiempo hasta finales de los 90,concretamente hasta 1998,encontramos al por entonces aspirante y después malogrado Richard Burns corriendo con el que era el mejor coche(Mitsubishi Lancer) pero a la sombra de un Tommi Makinen pletórico.Su hambre de ganar le llevó a irse en el 99 con Prodrive/Subaru donde dos años después fué campeón del mundo;sí,vale que Colin Mcrae justo ese año se marchó a Ford y en Subaru necesitaban otro primer espada pero Burns estaba ,como he dicho antes,en el mejor equipo del momento.



Un poco antes de esto pero también en Prodrive/Subaru llegamos al ya mítico affaire entre Carlos Sáinz y Colin Mcrae entre 1994 y 1995 que acabó con el bicampeón español en Ford.

                                                                                     driverphoto.foroactivo.com
Otro salto hacia atrás nos lleva hasta 1988 cuando el flamante bicampeón(por entonces) Juha Kankkunen se cambió de Lancia a un emergente equipo Toyota quizá ayudado por el apremio de un Massimo "Miki" Biasion que apuntaba maneras.Aunque al final casi fué peor el remedio,con otro jovencito que incordiaba demasiado(Carlos Sáinz) y le llevó de vuelta a Lancia en 1990.



En contraposición a estos grandes nombres cuya ambición les llevó a no elegir siempre las mejores opciones,están otros como Gilles Panizzi,Toni Gardemeister,Francois Delecour,Harri Rovanpera,Jean Ragnotti,Piero Liatti,Philippe Bugalski...que siendo también buenísimos pilotos en el momento en que debieron dar un paso al frente en busca de su gloria quizá prefirieron ir sobre seguro al abrigo de grandes marcas(caso de Panizzi en Peugeot,Bugalski en Citröen o Ragnotti en Renault) o les faltó ese plus de agresividad cuando se les presentó la oportunidad(Delecour y Gardemeister en Ford) pero sin el apoyo total para luchar por los títulos,si no como "simples segundones"(Liatti en Subaru y Rovanpera en Peugeot o Mitsubishi).

Con este repaso por la historia queda claro que el gen ganador y la ambición son dos aspectos que no se pueden entrenar ni adquirir y,simplemente,se tienen o no se tienen.La diferencia entre los grandes campeones y los demás empieza aquí.

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