domingo, 20 de mayo de 2018

Cuatro Tenores

Con el lío de las manguetas ya superado (pero no terminado ni mucho menos) el CERA 2018 ha ido mutando, por suerte para tod@s, desde un ambiente de reproches y acusaciones hacia otro en el que coches y pilotos (con sus respectivos equipos detrás) son los únicos que copan la atención de un certamen que si bien empezó como empezó, va camino de convertirse en uno de los mejores en mucho tiempo por diferentes motivos.

Es cierto que el vacío provocado tras el mangueta-gate nos está privando de carreras al límite entre los N5, lo que redundaría en subir el nivel global de cada rally, pero visto lo visto en el excelente escenario que siempre son las islas canarias parece que no vamos a echar tanto de menos esa falta de competitividad en dicha categoría.
Comentaba poco antes que este 2018 podría suponer uno de los mejores años por varios motivos, bien, uno de ellos sin duda es que tras no pocas temporadas de suspicacias por lo que monta o deja de montar fulanito o menganito parece que por fin, y a sabiendas de que todos los aspirantes al título absoluto están asistidos por preparadores distintos, éstos corren con las mismas armas y bajo normativa FIA, aspecto que nos ayudará para conocer el grado de mejora y evolución que hará cada equipo dado que todos tendrán el mismo punto de partida (dependiendo claro de que cada coche tendrá sus actualizaciones de fábrica, unos quizá más que otros).

Otro motivo de congratulación sin duda es que en este 2018 se nos han juntado tres generaciones distintas de pilotos, algo ciertamente inusual y que estando todos con "idénticas" monturas nos va a permitir comparar el nivel de unos con respecto a los otros; por un lado tenemos al último superviviente de esa vieja guardia de principios del 2000 ahora pentacampeón y que pese a haber estado en una especie de semi-retiro y de "asomarse" ya a la cincuentena parece tener más hambre que nunca (sólo con la máxima motivación podría competir con sus actuales rivales);
tenemos también un treintañero que es el vigente campeón (conseguirá más títulos sin duda), capaz de ir muy rápido con un GT y con un 4x4 y que perfectamente podría haber "saltado" fuera del CERA;  y también tenemos dos pilotos por debajo de esa treintena que a través de distintos caminos se encuentran hoy disputando el cetro nacional frente a dos pesos muy pesados; uno con amplio bagaje internacional pero pocos resultados y el otro con muchos menos apoyos que talento y a quien los parones obligados le han podido frenar su desarrollo como piloto que ahora por desgracia le tienen un pequeño escalón por debajo del resto.
También no lo olvidemos, tenemos a los cuatro contendientes con cierto apoyo de marca (unos más que otros sí) y tanto Hyundai como Ford aportan su granito de arena a todos los proyectos dando un plus en tanto en cuanto a garantizar un programa fiable para todo el año.
Siempre es de agradecer el apoyo oficial porque recordemos que otras marcas como Skoda, con tanto retorno internacional en el ERC y WRC2, no tuvo a bien aportar un sólo euro a los hermanos Burgo y por ello les tenemos ahora en las cunetas.



APRETARSE LOS MACHOS 

En el Sierra Morena no pudo ser "gracias" a que "Cohete" sufrió una de esas averías (por llamarlo de alguna manera) que posiblemente se podría atribuir a las prisas por llegar más que justos a dicho rally, pero en el excelso Islas Canarias nos hicimos una idea de por dónde van a ir los tiros de aquí a Noviembre en el "un poco menos excelso" Rally CAM; podemos frotarnos las manos.

De algún modo era lógico que el asturiano marcara muy buenos tiempos tanto por venir del ERC
(donde el ritmo en los tramos es notablemente alto con respecto al CERA como vemos cada año en los tiempos que marcan unos y otros en el Islas Canarias) como por conocer ya dichos tramos y quizá incluso también por las características de dichos tramos isleños (como también podrían haber sido los del Sierra Morena) donde las carreteras suelen ser anchas y con asfalto en muy buen estado.
Lo que parece obvio es que el I20 R5 es un coche bien hecho (ya con Ares se vio el año pasado cuando pudo tenerlo a su gusto) y resulta extraño que desde Hyundai no tengan mejor escaparate para su carreras-cliente con un programa oficial para el ERC o el WRC2 más allá de promocionar al Huttunen de turno quien por cierto de momento no está mostrando nada.

Es justo reconocer que quizá la travesía de "Cohete" en Peugeot con el 208 T16 estuvo lastrada por la presión de no tener un coche competitivo y aún así intentar lograr lo que no era posible porque correr como lo está haciendo con el I20 en sus primeros rallies no se le vio en dos años con el T16 ( a Pepe López tres cuartos de lo mismo). Algunos dirán ( yo entre ellos) que el rendimiento mostrado por Laurent Pellier en el Sierra Morena y Canarias con el, supuestamente, mismo coche es más que chocante si lo comparamos con el del asturiano y la verdad, el mismo Suárez dijo recientemente que el actual T16 de Pellier tenia mejoras que el suyo no disfrutaba; yo la verdad lo dudo bastante porque hace tiempo que ese coche se "abandonó" desde Peugeot más allá de afinarlo en tanto en cuanto a su fiabilidad y a que posiblemente, Pellier sea mejor piloto que Suárez.

Desde luego que por lo menos para pelear el CERA al asturiano está claro que le basta y sobra con lo "aprendido" en su andadura internacional (es evidente el "salto" en tiempos entre pilotos CERA y pilotos ERC) viendo sus tiempos con respecto a sus más directos rivales, quienes, monta y/o rendimiento de neumáticos aparte, me temo que se encuentran un punto por debajo en ritmo al "discípulo" de Sainz. Hemos visto tanto en Canarias como en Adeje a un Fuster buscando un set up idóneo en su Fiesta para estar en la pelea y a un Ares que, corriendo  casi casi a su máximo nivel como le vimos en Adeje, tampoco le llegó para contener a Suárez; de Pernía pues entre ese puntito menos que tiene incluso con Ares y Fuster y algunos problemas técnicos en su R5 que curiosamente otros no tienen pues está donde está desgraciadamente, un poco a remolque.

Por todo ello creo que el mayor hándicap que declinará la balanza del título entre uno u otro piloto van a ser las especiales características de muchos de los rallies que quedan por disputarse, empezando por Ourense. En asfaltos con mucho grip y un sol brillante ya sabemos que Suárez está por delante en ritmo pero Galicia, Asturias o Cantabria tienen muchas "trampas" (más todavía en tramos nocturnos) que hay que conocer y manejar y las tornas en estas circunstancias me da que se invierten totalmente; es por ello que pese a tener un ritmo superior no creo que Suárez gane el título, al menos en este 2018, porque no olvidemos que los descartes a final de año están ahí y en esto el asturiano tiene mucha desventaja pues ya tiene dos ceros por ninguno de sus rivales (salvo Pernía en el Cocido).

Sin embargo, me gustaría resaltar algunos aspectos muy mejorables en la actitud de Suárez más allá de su talento al volante y que, siendo como es (o ha sido) apadrinado por Carlos Sainz es más reprochable todavía pues aparte de aprender técnicas de conducción no le habría venido mal aprender también del bicampeón del mundo bastante más humildad de la que demuestra.
En su reciente año compartido con Pepe Lopez en Peugeot, el asturiano demostró un desmedido desdén hacia el madrileño como si éste fuese menos que él cuando ganar, lo que se dice ganar, han ganado lo mismo (la Peugeot Rally Cup francesa); en este 2018, al parecer el "señorito" Suárez debe considerarse demasiado importante (quizá se piense que por correr en karts con Fernado Alonso y mostrarlo en RRSS le convierte en un ser superior) como para "rebajarse" a hacer declaraciones a un medio nacional como Rallyes.net TV  donde desde hace años todos los pilotos del CERA nos explican a todos los aficionados sus sensaciones en la carrera, aparte de publicitar a sus respectivos patrocinadores por la red de redes; él por lo visto es más importante que todo eso.
De verdad que no sé de quién ha podido aprender esa actitud tan altiva y prepotente repito, sin haber ganado realmente nada todavía, porque si con hacerse con un Nacional de Tierra y una copa de promoción con un 2RM ya se tiene licencia moral para ir de divo por la vida pues qué sería de gente como Xevi Pons, Dani Solá, el propio Fuster, Puras, Vallejo, o su "padrino" Sainz.

Cada cual podrá hacerse una opinión al respecto de todo esto; yo ya tengo la mía y más allá de ser muy rápido en los tramos hay que mostrar algunas cosas más.



martes, 8 de mayo de 2018

Tres no son multitud

Precisamente aquello que echábamos de menos recién terminado el Tour de Corse (y que dudábamos pudiera producirse en el corto plazo) es lo que ha sucedido en el siempre deseado rally argentino; ironías de la vida.
Palos y más palos era casi lo único que merecían los tres equipos (mejor dicho dos, porque Citröen parece estar a otra cosa) tras comprobar cómo Ogier y sólo Ogier (sus compañeros Evans y Suninen no están para hacerle muchos favores quitando puntos a la competencia) se las bastaba solito para, después eso si de que su particular kriptonita llamada "Loeb" se auto-eliminara de un modo un tanto decepcionante, pasar por encima de todos los Toyota (con matices, eso si, dado que en la segunda parte del rally corso marcaron scratch tras scratch) y sobretodo de los Hyundai cuya trayectoria mundialista sigue siendo como una montaña rusa; después de cinco años en el WRC siguen encadenando fracasos como el de Córcega con actuaciones brillantes como la de Argentina sin que halla razón lógica aparente para explicar semejante metamorfosis; resulta que sus a priori pilotos especialistas de asfalto son más veloces sobre tierra; más ironías de la vida.

Dejamos la bella isla corsa con la resignación de saber que Ogier, con un Fiesta que de nuevo tiene financiación directa de fábrica, sigue siendo imbatible en el cuerpo a cuerpo, o lo que es lo mismo, en condiciones idénticas a sus rivales a la hora de salir al tramo. Por suerte en el WRC eso ocurre contadas las veces en asfalto, y en tierra... nunca. Ya sea polvo, roderas, gravilla, niebla o lluvia siempre hay algo que lastra al que sale primero, o le beneficia según la ocasión (por cierto hay que resaltar que esta vez el "señor llorón" no se quejó al respecto en todo el fin de semana) y si a ello sumamos el que la competencia por una vez haya dado pie con bola y sus pilotos estén centrados pues tenemos que Ogier sufrirá para no perder comba y ceder demasiados puntos porque como venimos diciendo, está solo contra todos y todos esos puntos que no sea capaz de sumar se los van a recortar unos u otros; de ahí que por ejemplo M-Sport a sabiendas de esto recurriese la penalización del PS en México por saltarse la ya famosa chicane y estemos aún pendientes de la resolución, que en caso de ser positiva para ellos daría a Ogier un respiro de 5 puntos extra sobre Neuville y Tanak.
Cinco puntos que no son pocos dada la inercia que está tomando el campeonato y que si en apariencia podría parecer muy desequilibrado para Ogier, creo que casi con total seguridad llegaremos a final de año con diferencias exiguas.

En este sentido, los tres siguientes rallies en Portugal, Cerdeña y Finlandia se me antojan particularmente importantes en la lucha por el título porque creo es el plazo de que disponen Neuville y Tanak para desbancar a Ogier del liderato, posición esta que opino resultará clave para destronarle definitivamente; dada la época del año que se avecina, los tramos de Portugal y Cerdeña sobretodo debieran ser muy perjudiciales para el que salga primero, es decir, Ogier, y esa es una baza que no pueden dejar escapar ni belga ni estonio ahora que sus respectivas marcas parecen haber encontrado el set up perfecto a sus coches sobre esta superficie. Si a ello le sumamos a un Sordo, un Paddon, un Meeke que no tenga cortocircuitos, incluso un Lappi o un Latvala (sobretodo en Finlandia)... la ocasión es favorable como nunca antes en la era Ogier.

Sobretodo porque por primera vez tenemos dos aspirantes reales frente al pluricampeón francés y si algún día falla uno, el otro puede que no e incluso habrá veces que estén ambos por delante como en Argentina pero creo que todo pasa porque alguno de los dos arrebate el liderato a Ogier como muy tarde en Finlandia; de no ser así en Alemania Ogier abriendo pista va a ser casi invencible (llueva o no) y en Turquía se defenderá de lo ganado en Alemania para volver a pegar un zarpazo en España y volver a defenderse o atacar según venga la climatología en Gales (que en Octubre muy bien podría ser lluviosa y beneficiar al que abra pista), acabando ya en Australia donde sería el único rally donde Ogier, saliendo primero, sufriría realmente y quizá ya fuese tarde.

Con este panorama el margen de error y la presión son inversamente proporcionales para las dos marcas asiáticas y sus pilotos aspirantes pero precisamente en ello reside la emoción y la ocasión de ver hasta dónde puede llegar cada uno y/o de qué pasta están hechos.
Neuville, por ejemplo, me sigue sembrando dudas en tanto en cuanto a que si el coche no está al cien por cien él no es capaz de darlo todo, sufre y ello se resiente en su calificación final.
En cambio Tanak lleva cinco rallies con un coche desconocido y ha hecho dos segundos y una victoria sobreponiéndose a las adversidades en más de uno y mejorando lo que parecía irreversible en un par de asistencias como quien dice hasta encontrar un set up con el que es obvio está muy a gusto (en esto también ha mejorado si escuchamos cómo habla de la evolución del Yaris),.

No olvidemos tampoco la capacidad de aguante a la presión, porque en estos momentos del campeonato Tanak la tiene toda sobre sus hombros ( y la va seguir llevando porque necesita ganar más rallies si quiere ser campeón, y yo le veo muy capaz) y lleva dos rallies de traca; me resulta muy difícil creer que Neuville hiciese lo mismo.
Por supuesto el grupo humano y técnico alrededor es crucial y aunque en este caso el dinero no creo sea problema ni para coreanos ni para japoneses (o fineses si preferimos) me da que en Toyota tienen las ideas y el camino a seguir más claro que en Hyundai (seguramente también personal con algo más de talento) aparte de a un piloto como Tanak que con exhibiciones como la de Argentina (en Córcega ya dio avisos) puede haber dado un salto cualitativo personal y profesional que le aúpe al nivel necesario ya no sólo para liderar un equipo que va para arriba descaradamente (desde que lo ficharon sabíamos que sería el líder) y "quitarle" el título a Ogier en un corto plazo (de lo que aún está a tiempo esta misma temporada tal y como sospechaba en Córcega) sino para marcar otra época quizá no tan abrumadora como sus predecesores franceses pero sí de varios años;

Poco o nada queda ya de aquel irregular jovenzuelo que volvió por dos veces a pilotar un WRC con M-Sport tras ser "castigado" un año entero allá por 2013 ante la falta de resultados (y quizá de dinero). Lo cierto es que su trayectoria es digna de ser repasada porque es un claro ejemplo de determinación y mejora personal en busca de un sueño para el que ahora no hay dudas está más que capacitado pero por el que ha tenido que luchar y sufrir, amén de "padecer" situaciones surrealistas como aparecer en la ceremonia de salida de México sin coche y con gafas de buceo; momento inolvidable.

Como decía antes, su situación actual en cuanto a edad (30 años, edad muy apropiada), experiencia ganada junto a uno de los mejores de siempre como es Ogier (esa es una de las claves de su mejora), ser rápido en todas las superficies y haberse unido a un equipo de fábrica con pedigrí y con un coche bien parido en su día y que solo puede ir a mejor, nos desemboca en lo dicho antes: un campeón del mundo en ciernes que puede marcar otro ciclo.

Por lo demás, y dejando de nuevo un poco a aparte lo que está sucediendo con Citröen y su harakiri interno por diferentes razones del que sus pilotos parecen contagiados (qué desperdicio de coche), me siguen sorprendiendo en lo negativo tanto Mikkelsen (que sigue quedándose muy atrás frente a sus compañeros cuando ellos sacan resultados) como Latvala (desde el abandono en Finlandia 2017 no levanta cabeza y este año ya está perdido como el que dice).
El noruego consiguió mucho más con muchas menos carreras en un coche que decían era indómito
(el C3) y en Hyundai no me extrañaría le acaben suplantando con lo cerrada que va a estar la pelea por el título de marcas en la cual y aunque parezca mentira Citröen aún no está desolgada.
En esta lucha yo no descartaría a Toyota, de hecho no creo que sea una locura pensar que podrían hacer doblete si Lappi ahora que ya va conocer más los rallies donde empezó en 2017, concreta los destellos que viene dejando rally tras rally. (de Latvala no sabe uno qué esperar)

Y concretar es lo que se espera que haga ese diamante en bruto llamado Kalle Rovanpera que con apenas bagaje en un R5 y en WRC2 ya se atreve a subirse a las barbas del vigente campeón del mundo en la categoría y crear un cisma dentro del equipo oficial Skoda ( con órdenes de equipo y dadas para mantener posiciones y la consiguiente desobediencia del finés) nunca visto antes y que muy bien podría compararse a lo que ocurre en F1 con Max Verstappen, aparte de recordarnos episodios históricos de un pasado añorado.
Este chaval promete porque corre muchísimo e hizo sudar tinta a Tidemand; el futuro es suyo.