martes, 31 de mayo de 2016

El renacido

Así podríamos llamar a Hamilton tras su primera victoria del año, más aún si vemos el raquítico botín de puntos que logró Nico Rosberg cuya actuación acabó siendo pésima y no precisamente por los ya clásicos problemas de los Mercedes con los frenos ( algo que parece de chiste el que un equipo de este nivel tenga estos problemas cuando ya vienen de atrás y sigan sin remediarlo) si no por otras "fechorías" que de nuevo ponen en entredicho su capacidad para aguantar la presión frente a la "fiera" británica. Esas fechorías a las que me refiero las sabemos tod@s pero yo me quedo con ese adelantamiento que le hizo su tocayo Hulkenberg prácticamente sobre la bandera a cuadros,(el cual me pareció indigno por la aparente desidia mostrada) y que  suponen dos puntos menos para el líder del campeonato y de los cuales muy probablemente tenga que acordarse en un futuro. Y digo esto porque una vez más hemos visto cual distintos son ambos pilotos de Mercedes y por qué uno lucha por su cuarta corona mientras el otro intenta conseguir la primera, (y me temo que así seguirá este año de nuevo); mientras Rosberg enseguida dejó paso a Hamilton cuando le sobrevinieron los problemas de frenos resignándose a no ganar cuando precisamente éste es su máximo (y único) rival, el británico no dudó en "lanzar" contra el muro a Ricciardo y a saltarse una chicane sin pararse a pensar en que podría ser sancionado (eso no va con él) si con ello podía mantenerse primero y hacer su estrategia que fue tan arriesgada como certera al ahorrarse un pit stop que personalmente creo no le hubiera servido para ganar de todos modos si a Ricciardo no le hubieran tomado el pelo del modo en que lo hicieron porque el Red Bull era más rápido con cualquier compuesto. No obstante las enajenaciones mentales también pueden afectar al personal de boxes y es un factor más que sopesar en las carreras así que el antes defenestrado Hamilton incluso hasta la misma sesión de clasificación, ha terminado el GP de Mónaco 2016 bebiendo champán con Justin Bieber,(otro individuo caracterizado por sus excentricidades siendo vehemente aunque parece un acompañante muy apropiado la verdad) y a tan sólo un Gran Premio de distancia con Rosberg.

Aunque no todo debiera ser vino y rosas para "El Renacido" Hamilton pues el salto competitivo dado por Red Bull es una realidad y están cerca, muy cerca de Mercedes, tan cerca que por chasis incluso diría que están por delante y por motor quizá se vea más claramente dentro de quince días en Canadá hasta dónde llega la última evolución de Renault pero puede que sea hora de que Mercedes haga uso de algún token.  Porque tener a un Ricciardo mosqueado y con "sed de sangre" que diría aquel con el actual Red Bull puede ser el rival que Mercedes no ha tenido en los últimos tres años.
Y es que el "circo" que le montaron al hasta hora risueño australiano ha sido de los gordos y de los que no es posible sacar justificación alguna sobretodo porque le dijeron por radio que entrara... salvo si somos muy maquiavélicos y se nos ocurre pensar que todo fue un plan para minimizar el desastre de Verstappen a sabiendas que es el nuevo niño bonito del equipo. Pero sería tan retorcido Helmut Marko y cía. de renunciar a una victoria que realmente sólo encumbraría a Ricciardo dado que el potencial del coche ya es un hecho para evitar que su "joyita" fuese el "hazmerreír" mediático del GP? A mí no me extrañaría nada.
Y todo esto se podría extrapolar perfectamente a lo ocurrido con Carlos Sainz porque un podio del español en semejante circuito y en semejantes circunstancias levantaría la alfombra que esconde las pelusas sobre el más que claro favoritismo hacia "Mad Max" (esta vez sí que fue loco de verdad) insostenible por rendimiento global salvo alguna carrera esporádica.
Porque no olvidemos que por primera vez Sainz ha criticado claramente al equipo por dichos "errores" cuando otras veces siempre minimizaba éstos; pero es posible que la paciencia esté agotándose, y es normal, pues de qué sirve esforzarse al máximo si luego cada vez que paras en boxes no tienes confianza en tu equipo y ello puede hacer mella en tu propio rendimiento a la larga.
Ya hablé de las posibles "novias" que tenía el madrileño a medio plazo y de seguir corriendo así el medio plazo podría ser corto, muy corto.  A Kvyat le han ninguneado sin miramientos y por mucho menos de lo que Vertsappen ha hecho ya pero ni Sainz ni Ricciardo van a estar por la labor.

En general creo que dentro del organigrama Red Bull están un poco alborotados no sé si por el efecto "Verstappen" (recordemos "empujado" por cláusulas contractuales) o por qué pero los evidentes errores del holandés todo el fin de semana han sido una evidencia de que quería volver a hacer una carrera memorable sin conocer o reconocer sus límites y lo peor es que nadie en el equipo ha "frenado" esas ansias de ser el mejor y más joven de nuevo.

Menos mal que nadie frenó a Fernando Alonso por detectar alguna anomalía en ese MP4/31 y pudo aprovecharse de las circunstancias que tan estupenda carrera ofreció gracias a la lluvia y a esa amplia gama de compuestos disponibles de las que sus innatas dotes al volante sacaron un botín de puntos más que inesperado dado el mediocre ritmo del que el supuesto brillante chasis ofreció.
De nuevo entrando en Q3 gracias a errores ajenos y con un ritmo proporcionalmente peor que antes de incorporar las mejoras aerodinámicas lo que sigue dejando dudas y metiendo presión a esas mejoras de motor que deberían incluir en Canadá.
Aún así esto es siempre dependiendo de cómo se quiera ver; algunos dirán que si con este coche a medio hacer Alonso hace un quinto, qué hará con el coche entero, pero la realidad es que Mónaco no es comparable a nada y Canadá marcará el paso de verdad donde las miras deben estar en cual lejos o cerca están tanto Toro Rosso como Force India, los equipos con los que luchará Mclaren el resto del año en el Mundial de Constructores.
Al menos el Mclaren es mejor en chasis al Williams y eso sí es algo real pero lo malo es que la antaño exitosa escudería británica ya no es referencia en la parrilla.




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