Empezando por el más madrugador Mundial de Rallies hay que congratularse por la mejora que poco a poco va experimentando el campeonato en el presente y muy especialmente en el corto plazo que representa ya la cada vez más cercana temporada 2017. En estos últimos dos/tres meses nos hemos "hartado" a ver vídeos de los nuevos WRC que por ahora son meros coches "laboratorio" pero que en general, y pese a tener algún error que otro conceptual (como la inclusión de diferenciales activos sin los cuales si podrían ser llamados legítimos herederos de los Gr. B) parecen ser los coches que todos esperamos viendo su apariencia y escuchando lo que dicen de ellos los propios pilotos. Muestra de ello es la creación de una especie de Superlicencia que limitará su conducción a pilotos oficiales lo cual está muy bien pero eso significa que los también necesarios equipos y pilotos sin apoyo de los constructores van a estar ahora marginados técnicamente? No olvidemos que uno de los mayores atractivos del WRC ha sido poder ver a pilotos con coches privados echar carreras e incluso ganar a los oficiales "simplemente" con sus manos como mejor herramienta. Con los tintes que está tomando la normativa para 2017 eso se acabará y no podremos ver más a tipos como Ott Tanak en puestos de honor.
El asunto no parece tener fácil solución porque si bien los R5 no se verán afectados al estar en su propio campeonato de WRC2 ( el cual por cierto sin Lappi y Suninen va a quedar muy pobre) el seguir permitiendo que las estructuras privadas ganen a las oficiales parece inviable con esta nueva Superlicencia y es una pena porque se le quitará parte de su esencia al Mundial. Crear como se ha dicho un campeonato paralelo con los actuales WRC personalmente me parece que no ha lugar porque seguirían sin poder alcanzar a los más modernos y entonces el coste de la inversión podría no merecer la pena teniendo otro campeonato con los R5 más asequible pero claro el problema se lo han buscado ahora ellos solitos porque si de algún modo los equipos oficiales quieren recuperar sus inversiones vendiendo los antiguos WRC por el otro no quieren que la misma sea aprovechada por equipos privados para hacerles competencia y por ello usan la excusa de la "extrema" rapidez de los nuevos coches cuando seguro hay pilotos sin asiento oficial que serían más que capaces de ser competitivos con ellos, más incluso que algún que otro oficial (como Mads Ostberg) Esto al final parece ser como el perro del hortelano que ni come ni deja comer y el mayor perjuicio es para el Campeonato en sí mismo
(Martin Prokop, Brian Bouffier, gente así) acotando eso si, a jóvenes provenientes de categorías inferiores o herederos de imperios capitalistas sin apenas km (como Lorenzo Bertelli el cual pasa más tiempo chocando que rodando) su acceso hasta que tuvieran un mínimo de carreras con un R5 y un test auspiciado por la FIA para comprobar que puede manejar un WRC 2017.
Mientras todo esto se aclara o empeora y entre vídeo y vídeo colgados en la red de este u otro equipo, el Mundial 2016 sigue su curso y por fin llegó el tan deseado asfalto para que Dani Sordo pudiera brillar como en ninguna otra superficie lo hace. Afortunadamente el rendimiento del cántabro estuvo a la altura de las expectativas y sólo la suciedad acumulada por los recortes en las curvas de los coches precedentes le impidió estar en tiempos de Ogier. De haber salido justo detrás de él creo que habría ganado por mucho que el francés intentara "sacar" mierda adrede como buen rastrero que sigue demostrando ser; esta marrullería ya la hizo en el pasado para intentar frenar a Loeb y esta vez Mikkelsen denunció la misma estrategia frente a lo cual "messie" bocazas se hizo el "sueco" preguntado por la prensa muy al estilo de Vettel . Que asco le tengo ya a este tipo y a su copiloto.
Tras lo visto en este año 2016 no creo que nadie, ni el propio Sordo, se atreva a criticar el hecho de estar "encasillado" como piloto de asfalto porque esta es la realidad (como ejemplo está el haber corrido como corrió el PS teniendo un amortiguador tocado). No hay coche con el que no haya corrido como el viento en esta superficie y no pasa nada. De hecho Hayden Paddon es claramente peor sobre asfalto de lo que Sordo es en tierra pero lo malo es que hay mucha más tierra que asfalto en el Mundial.
Tampoco sorprende que Neuville sea igual de veloz pero si molesta, al menos a mi, porque es otro bocazas que se tiene demasiada estima a sí mismo para lo poco que ha logrado aún en el WRC y aún así con un poco más de regularidad y consistencia podría incordiar mucho a Ogier. De momento incordia a Sordo y me encantó ver su reacción al perder tan sólo por una décima el segundo puesto tras más de 300 km. Sencillamente increíble y por una vez el Power Stage fue interesante de verdad.
Y hablando de incordios el que ahora mismo incordia más a menudo a Ogier y sorprendentemente bien en asfalto es Mikkelsen ya que Latvala sigue con su "via crucis" y es una pena porque estando plenamente operativo el finés habríamos visto un doble duelo entre Hyundai y VW con dos escandinavos frente a dos latinos.Y aún así no fue malo el rally ni mucho menos.
Como digo, Mikkelsen sigue siendo inusualmente veloz en asfalto y si lograra tener la consistencia que ya debiera haber encontrado dada su experiencia si quiere ser campeón algún día podría haber dejado ya muy tocado a Latvala dentro del equipo pero sus desconexiones mentales o falta de temple al ver a Ogier justo detrás no le dejan pasar de ser lo que es, un "ente" que ni gana ni puntúa.
Sin embargo lo que no sirve para estar en tiempos de Ogier si alcanza para hacer sudar al resto, lo que demuestra que muy a pesar mio y de otros tantos, Ogier está en el nivel de los más grandes y el resto no.
Al menos parece que el I20 ha logrado el nivel suficiente para pelearle como nadie antes pudo el título de marcas a VW quizá hasta el último rally en Australia (que pena de nominaciones erróneas en el pasado), viendo que ahora vienen dos rallies más de asfalto y cómo se las gasta el I20 en manos españolas y belgas. Pero los tramos corsos no son los de Alemania, menos permisivos, y requieren más técnica o locura al volante, según se mire, aparte de que la meteorología cambiante puede ser crucial para la monta de gomas. En este sentido los que más confianza me generan son Ogier y Sordo, el resto son una incógnita. En cualquier caso se avecina apasionante ese doble duelo a nivel de marcas y pilotos entre VW y Hyundai. Una Hyundai que está haciendo gala los últimos meses de un gran competitividad a nivel de equipo con hasta tres programas distintos de desarrollo simultáneos. Los resultados con el actual I20 han terminado por ser buenos pero con un claro retraso que les podría haber costado ser campeones de marcas este año. Esperemos que sean más rápidos a la hora de mejorar el de 2017 porque retraso ya acumulan de nuevo con la competencia.
Del resto del rally cabe decir que las gomas Dmack están muy verdes en asfalto y Tanak tampoco es que sea un especialista en la materia por lo que poco o nada hizo esta vez; los otros Fiesta de M-Sport pues a lo suyo, es decir, ni fú ni fá. (Camilli es aquí donde debería correr mínimamente). A quién subirá Malcolm Wilson en sus coches el año que viene? Gran misterio.
Y en el retorno de Jose Antonio Suárez en su ya extraña temporada como oficial de Peugeot pues de nuevo más expectativa que rendimiento por mucho que no me guste decirlo. No acaba el asturiano de hacer un buen rally de principio a fin por distintos motivos. El coche da muy poco de sí con muestras de una puesta a punto algo deplorable siendo un equipo oficial (tener problemas de diferencial no es muy de recibo) y correr en asfalto no parece ser ya suficiente.
Cierto que el nivel del WRC2 es alto pero no sirve de mucho correr en dos tramos y en el resto perderlo todo. Haber si se endereza la cosa pero ese 208 T16 parece ser una pesadilla más que otra cosa.
Ahora debería venir China, otro rally donde Sordo podría volver a brillar con fuerza pero los tremendos contrastes que tiene el gigante asiático debido a su régimen político entre otras cosas no parecen el mejor escenario para celebrar allí un muy necesario rally del Mundial. No hay duda que de si se ha vuelto a insistir con China es por su importancia estratégica en el mercado.
Japón es la respuesta, pero mejor en asfalto que tierra hay mucha ya. Nunca debieron suprimirlo.
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