Marchando una de rallies

Muchas cosas han pasado en apenas quince días y desgraciadamente algunas han sido trending topic en las redes sociales, en la televisión y en la prensa escrita muy a pesar de todos los que amamos esta cada vez más perseguida especialidad del motorsport.
Lo que son las cosas,recién terminado el Rally de Ferrol y con Iván Ares haciéndose sitio en el CERA, Álvaro Muñiz hablaba con los medios sobre la inminente celebración del Cidade de A Coruña de cuya organización era responsable; quién iba a imaginar lo que ocurriría. Desgraciadamente lo que sí era de esperar fue la asquerosa y repugnante repercusión de que se hicieron eco tantos y tantos medios de comunicación que jamás le han hecho el más mínimo caso a los rallies y aprovechan el dolor y desgracias ajenas para vender un puñado de periódicos o ganar un poco más de audiencia. Estas conductas deberían estar penadas
Lo que no era tan de esperar fue la desfachatez en la actitud de reconocidos periodistas nacionales (por supuesto con ningún conocimiento de lo que es un rally) al promover la prohibición de los mismos. Afortunadamente toda esta escoria periodística no necesita respuesta ya que ellos mismos se evidencian cuando los propios familiares de las víctimas exculparon de toda responsabilidad al piloto y copiloto involucrados aunque lo malo es que esto último no vende tanto y las masas borregueras asimilan el mensaje de que poco menos que los rallies son sinónimo de muerte.
No obstante en cierto modo me siento orgulloso una vez más de toda la comunidad rallística,la cual incluye desde pilotos (el propio Dani Sordo) hasta los más anónimos aficionados (entre los que me incluyo) por la inmediata respuesta de solidaridad que demuestra el alto grado de conocimiento sobre el esfuerzo que conlleva sacar adelante un rally y poder correrlos, como para que venga la escoria de siempre a echar mierda encima. Por favor, déjennos en paz y sigan mirando a otro lado.

Como no puede ser de otro modo la mejor arma para cerrarles la boca a toda esta basura informativa es no darles nada sobre lo que puedan "carroñear" y seguir extremando las precauciones, lo cual irremisiblemente pasa por la buena conducta de los aficionados que llenamos las cunetas.
Y si antes hablaba de la buena respuesta de la comunidad rallística también hay que criticar la terrible relación y ejemplo que han dado los máximos responsables administrativos de este nuestro querido deporte, a cuya vergonzosa conducta han ayudado en cierto modo reconocidos periodistas especializados echando leña innecesaria al fuego, de manera oportunista; si sabían que la organización no tenía supuestamente todo en regla por qué no lo denunciaron antes en vez de hacer titulares sensacionalistas? Penoso. Como penosa es la conducta de Carlos Gracia quitándose toda la culpa y acusando a la federación gallega cual escolar cuando castiga la "seño" sobre si ésta actúa al margen de la normativa nacional. Mucho tiempo ha que estos conflictos vienen dándose y en vez de demostrar una actitud reconciliadora y con propósito de enmienda van y se echan mierda unos a otros. Otro ejemplo más de la errónea gestión que desde la Federación Española se hace para y por el automovilismo nacional en lo que a los rallies atañe. Y mientras seguimos perdiendo hornadas de potenciales pilotos mundialistas a la espera de que vuelva a surgir un Carlos Sainz asi por arte de magia. Podemos esperar sentados.